A niños, adolescentes y adultos que presenten necesidad de mejora en:
Problemas de aprendizaje
Para poder hablar, leer y escribir correctamente es necesario poder discriminar los sonidos, analizarlos y reproducirlos mediante un oído libre de todo bloqueo
Alteraciones del comportamiento y las emociones
Encontrar el equilibrio de escucha interior, y de ese modo conectar armónicamente con el mundo que nos rodea
Episodios de estrés, de ansiedad y de depresión
Proporciona energía, es decir, dinamiza el cerebro relajando el sistema límbico, potenciando al mismo tiempo la concentración y la creatividad
La voz, el canto y la música
Permite aumentar la discriminación auditiva, posibilitando el control de la voz hablada y cantada en todos sus parámetros: impostación, timbre, volumen, afinación y pronunciación
Facilita el aprendizaje musical
La integración de lenguas extranjeras
Facilita integrar todos los parámetros de cada lengua: precesión, retardo, tiempo de latencia, bandas de frecuencias específicas.
Adultos o mayores
Con la edad se pierden principalmente los sonidos agudos, que son los que aportan energía. Por tanto, es una vía para poder activar el pensamiento y mejorar en creatividad y memoria, retrasando el envejecimiento.
Evolución personal
El oído electrónico actúa como un activador cerebral optimizando nuestro potencial: nos da energía para acceder al neocortex y, así conseguir mayor lucidez de pensamiento y mejor reflexión, ya que la acción beneficiosa que recibe el sistema límbico nos permite tener una mayor calma emocional y física.
Para la mujer en el período de embarazo.
Ayuda a la madre a vivir el embarazo de forma más relajada y, amplifica la comunicación con el feto, que recibe el beneficio de una estimulación neurológica que repercutirá en un mejor desarrollo neurológico.
Diferentes patologías (Derrame cerebral, Autismo, Síndrome d’Asperger, Síndrome de Down, Parálisis Cerebral,….) La Audio-Psico-Fonología aportará a la persona un aumento de energía, deseo, y capacidad de comunicación que le permitirá recuperar la coherencia con el propio cuerpo, mejorando habilidades motoras y con el mundo que le rodea.